Si está a la moda, yo lo debo tener. No, perdón, ya lo tengo. Vaya, la colección del diseñador que esté de moda, antes que llegué a esta república bananera, yo ya la tengo. Sí, esos pantalones que se pondrán de moda después de un año de que se usen en Europa, me los compro en cuatro colores diferentes, lo más coloridos, que importa que me vea como un tamal mal amarrado. La elegancia nunca se pierde.
El celular con la última generación en telecomunicaciones. Sí, ese que tiene miles de funciones que en la vida aprenderé a usar, o ni siquiera usaré porque no entiendo el manual que está en inglés y aunque, con diccionario en mano, nunca sepa bien a bien que es "sincronizar los mensajes, direcciones y contactos de amigos del correo", lo tengo. Y me encanta que a la mitad de una cena o en el cine suene y todo mundo, con cara de atónito, se me quede viendo y me envidien mi celular. Dios, la elegancia nunca se perderá y me encanta ser un "gurú" dentro de mis círculos sociales.
Sí, así soy yo...cualquier novedad la tengo. Soy el primero en saber que es de lo que se habla en otros países, primermundistas todos, y sobre todo lo que causa revuelo por allá..sino, fíjate...
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